Up Devices, un caso de éxito de transferencia tecnológica efectiva

Con motivo de la Semana de la Ciencia y la Innovación 2018, del 5 al 18 de noviembre en Madrid, ayer tuvo lugar en La Nave la actividad ‘Transferencia tecnológica efectiva: casos de uso’, con el objetivo de acercar a la ciudadanía las actividades de investigación científica que surgen de las universidades y centros.

¿Qué es la transferencia tecnológica?

La transferencia tecnológica efectiva surge cuando, gracias a un acuerdo de colaboración entre universidades, centros de investigación y empresas, se protege una tecnología o producto a través de una patente o modelo de utilidad, y se desarrolla así la idea hasta conseguir lanzar un nuevo producto al mercado. Un ejemplo claro lo tenemos en startups como Up Devices, que está trabajando para acercar el entorno de los laboratorios a la sociedad mediante una ingeniería enfocada en el diseño de dispositivos médicos que mejoran la calidad de vida de los pacientes crónicos. De esta forma, se reduce la brecha que existe entre los hospitales más innovadores y la industria de dispositivos médicos, fomentando la innovación de tecnología y productos a través de la metodología Lean Startup..

«Los investigadores necesitan el apoyo de ingenieros
para desarrollar productos tecnológicos comercializables y también para desarrollo de negocio».

 

Alfredo Azabal y Santiago-Valdepeñas, socios de Up Devices, después de trabajar juntos en la empresa Dyson, se vuelven a encontrar en 2016 en el programa de aceleración HealthStart organizado por Madrid+d, donde ponían en contacto a emprendedores y profesionales sanitarios con ideas innovadoras. Gracias al programa, cerraron un acuerdo con la Fundación para la Investigación Biomédica del Hospital La Paz para el desarrollo de varias tecnologías y su posterior comercialización.

Actualmente están desarrollando OstoCutter, un cortador automático de discos de bolsas de ostomía (intervención quirúrgica que genera un orificio -estoma- en la pared abdominal para dar salida a la materia fecal o urinaria). El Hospital La Paz puso en contacto a Azabal y Valdepeñas con Francisco García Rivera, un enfermero que habitualmente trabaja con pacientes ostomizados, para que conocieran los principales problemas con los que los pacientes y profesionales se encontraban. “Vimos que gracias a la tecnología se podría mejorar la calidad de vida de los pacientes y dar más medios a los profesionales para el cuidado de los estomas”. Ahora están en fase de ensayo clínico, para demostrar la eficacia de OstoCutter, en el que también está participando Paloma de la Quintana, responsable de la consulta de Ostomía del Hospital La Paz.

OstoCutter nace para dar solución a los medios actuales para cortar el disco de ostomía, que no son exactos. Es un dispositivo que corta el disco de ostomía de forma automática y siguiendo el contorno exacto del estoma, gracias a una app que fotografía y calcula las coordenadas del contorno del estoma. Y es que, a día de hoy, en España, hay más de 70.000 personas ostomizadas, y cada año se producen más de 13.000 nuevos casos. En Europa hay 700.000 personas y 3 millones en el mundo.

Gracias al acuerdo cerrado en noviembre de 2017 con el Hospital de La Paz, Up Devices seguirá trabajando en nuevas tecnologías y modelos de negocio apropiados para pacientes ostomizados. De hecho, ya están desarrollando otros dispositivos con el Hospital La Paz, como un difusor de luz biocompatible para la mejora de la terapia fotodinámica que permitirá aplicar terapias mínimamente invasivas contra el cáncer.

Up Devices también está colaborando con CSIC, la Universidad de Extremadura, y con la financiación de la Comunidad de Madrid, para desarrollar “nuestra propia tecnología de Nariz Electrónica, para detectar enfermedades respiratorias. De esta forma, los pacientes crónicos tendrán una herramienta que mida en tiempo real el estado de su enfermedad”, explican los fundadores. “Como piloto del proyecto, desarrollamos un array de sensores para la detección de aromas fuera del estándar en la cerveza, durante la segunda edición del programa de aceleración BarLab, en colaboración con el grupo Mahou-San Miguel”. El resultado: han conseguido definir las especificaciones para una nueva generación de sensores nanoestructurados novedosos y más selectivos.

Desde mayo de 2018 forman parte de la comunidad de startups residentes de La Nave, con un espacio físico de trabajo para sacar adelante estas innovaciones médicas. Además, en junio de 2018 fueron aceptados en el programa de aceleración EmprendeInHealth, promovido por Lilly y Unlimited España; y en septiembre de 2018 en el programa HealthStart de la Fundación Madrd+d.

Casos de usos de la Transferencia tecnológica efectiva

La actividad transcurrida ayer en La Nave también contó con la colaboración y ponencias de diferentes startups, centros de investigación y tecnología y corporates, con representantes de CSIC, IMDEA Alimentación, UC3M, AirBus BizLab, 6DLab y Precision for Health.

La mañana comenzó con un caso de éxito como es el de La Gula del Norte. La escasez de este pescado llevó a investigar y crear un sucedáneo de la gula con proteínas de pescado, un descubrimiento que está basado en una patente del CSIC. Continuamos la jornada conociendo el proceso de IMDEA Alimentación, que se centra en el estudio de genes y mutaciones genéticas, cerrando acuerdos con empresas para realizar doctorados y desarrollar soluciones de aplicación inmediata. Y con la Universidad Carlos III, que trabajan principalmente en la creación de spin-off, empresas creadas a partir de procesos de investigación.